Tamales de acelga

Estos deliciosos tamalitos son frecuentes en mi familia y se sirvieron el día de mi examen profesional. Me encantan y podría comerlos por días seguidos sin parar. Se sirven bien ahogados en la salsa que los acompaña, con crema y queso opcional. Algo que me gusta mucho de estos tamales es que la hoja se come.

Ingredientes

Para 1 Kg de masa

  • 1/4 de queso fresco rallado
  • 1/4 de Kg de manteca de cerdo
  • Caldo de pollo ( de preferencia donde se cocieron alas, patas y la pechuga para que esté un poco grasosito, jeje
  • Sal al gusto.

Para la salsa

  • 1 Kg de tomates verdes (quieres mucha salsa para tener disponible al momento de servir)
  • Alguna cantidad arbitraria de chiles verdes. Yo uso chile de árbol verde. (ajustar para picante, yo pondría 5 por cada cuarto de litro)
  • Cilantro
  • 2 o 3 dientes de ajo

Para el tamal

  • Dos manojos de hojas de acelga grandes, enteras y sin hoyos.

A la hora del armado se pueden parchar los hoyos pequeños con los pedazos de acelga rotos. O Juntar dos hojas chiquitas para hacer un tamal.

Instrumentario

  • Una olla tamalera proporcional a la cantidad de masa e ingredientes
  • Una palangana para revolver la masa
  • Una olla para cocer la salsa

Preparación

Masa

Mezclas la masa con el queso, la manteca y la sal y le vas poniendo un poco de caldo de pollo para que la masa quede suave. Hay que batir un buen rato con la mano para que quede bien.

Salsa

Pones a cocer los tomates y chiles. Luego los mueles con 2 o 3 dientes de ajo, cilantro y sal al gusto. Si quieres también le puedes poner un poco de orégano. Cuando ya esté la salsa, mezclas la mitad con la pechuga deshebrada.

Tamales

Tomas una acelga grande y sin hoyos, le pones una bola de masa enmedio, la expandes tantito pero no demasiado (no quieres hacer una fina sábana de masa, sino más bien un grueso colchón) y le pones la salsa con el pollo enmedio. Enrollas la hoja con la masa tratando de encerrar la salsa con esta última y dejar bien cerrado el tamal, y lo pasas a la olla tamalera.

No es necesario usar palillos para cerrarlos, solo mételos en la olla inmediatamente después de armados.

Llena la olla, ponlos a cocer con la tapa puesta. Checa el nivel de agua del fondo cada tanto tiempo para asegurar que siempre haya.

Para servir se pone el tamal en un plato (de preferencia hondo) y se le pone más salsa (porción sin pollo) encima, además de otro poco quizá de queso fresco.