Too much of a free spirit

El título de este blog no es una coincidencia del azar, o una frase simple que me haya símplemente gustado. Esta es su historia, y parte de la mía.

En mi tiempo en que viví en Estados Unidos, breve como fue, pasaron muchas cosas que me marcaron. Fue una época de conocerme a mí mismo y de entender quién o qué soy.

Por aquellos tiempos mi entonces pareja (y prometida) describía a una conocida común o hablaba de ella. En realidad no recuerdo absolutamente nada más de la conversación, solo que usó la frase she's too much of a free spirit. La resonancia que eso causó en mi cabeza fue tal que no la olvidé. Me di cuenta de que aunque no se refería a mi, era una descripción que me quedaba a mi. Y quizá aun no lo sabía, de hecho probablemente estaba a punto de descubrir qué tanto.

Poco tiempo después me fui para siempre de ese país, llevándome entre otras cosas esa frase que después usaría para nombrar este blog. Desde entonces me acompaña como una descripción que elegí para mi mismo. Me reconozco desde mi libertad, desde mi interés de alcanzarla y de expandirla y de preguntarme, en aquellos lugares donde no la tengo ¿a qué se debe?

Diríase un camino egoísta tal vez, y un poco es así por naturaleza, pero no necesariamente. En el camino de descubrir mi propia libertad también he encontrado las formas en que la he quitado a quienes me rodean. Y al hacerme consciente de ello lo puedo evitar.

Entonces, si a veces te parece que soy demasiado un espíritu libre, estás en lo correcto. Es mi sino.